sábado, 8 de enero de 2011

DE PASTORES MERCENARIOS Y DE ÉXODOS Y MANÁS.

  

                                                                                 imagen conseguida en Wikipedia



No me interesa ya este mundo de intereses,
no me divierte nada este inmenso carnaval,
tras cada máscara sólo veo indicios de sospecha
y en cada cintura intuyo un puñal.

No son los lobos los que extinguen los rebaños,
son los pastores mercenarios que se venden al poder,
pues los conducen al borde del abismo
con los ojos vendados de idiotez,
éxodo, alimentado con maná mediático,
hasta una falsa tierra prometida.

¡Qué difícil es ser creyente
cuando te han mentido tanto
que ya no hay nada en que creer!


Quisiera olvidarme de todo lo aprendido,
partir de cero camino del infinito,
abrir la puerta que lleva hasta mis tuétanos
y refugiarme allí hasta que salga el Sol,
pero las horas me tiran de la mano
y hay llamadas que tengo que atender,
hoy sigo siendo esclavo de un faraónico poder,
de ese que ha diseñado la detestable pirámide
de las clases sociales.


Impersonem.